y me olvidé las ojotas

 Me prestaron las antiparras (escafandras, anteojos para ver bajo el agua, etc.) y me olvidé por completo de que estaba a tan solo una hora aproximadamente de Córdoba.

Vi de cerca una vieja del agua, una simple, común y enorme vieja del agua y yo estaba en medio del documental más osado de discovery. Seguir leyendo